- El Raeton completó hace unos días la segunda prueba más larga del mundo para un vehículo autónomo.
- La ruta fue de más de 2,000 kms., una distancia similar a un viaje de Tumbes a Arequipa.
Por primera vez en China y por segunda vez en el mundo, Changan pone a prueba un automóvil autónomo para un recorrido de más de 2 mil kilómetros. El fantástico Raeton partió del Instituto de Investigación de la automotriz en Chongqing, en China, y culminó en Beijing, luego de atravesar ciudades como Xi’an y Zhengzhou.
Cientos de periodistas llegaron a Chongqing para presenciar la partida del sedán de tecnología autónoma avanzada, un verdadero hito en el desarrollo de nuevas posibilidades para la industria automovilística del futuro.
El test drive sirvió para probar la capacidad del Raeton para mantener una conducción autónoma en un solo carril, utilizar el control de crucero adaptativo (ACC) y lidiar con la congestión de tránsito en las carreteras. También de pasar a otro carril cuando el avance es lento (si el piloto así se lo pide) y de identificar los límites de velocidad al leer las señales en la vía. Esto es posible gracias a una combinación de alta precisión de rastreo por radar, inteligencia artificial y tecnologías de imagen gracias a sus cámaras incorporadas.
El avance en la investigación de vehículos de tecnología autónoma avanzada ya comienza a dar sus frutos en los autos que circulan hoy en día. La SUV CS75, por ejemplo, brinda al conductor vistas panorámicas de los alrededores al momento de estacionarse y guías para el cambio de carril. Para el 2018 Changan empezará a ofrecer más opciones de funcionalidad autónoma en sus modelos ya existentes.
Todos estos hallazgos, que mejoran la seguridad del vehículo y hacen más placentera la experiencia de viaje, serán perfeccionados con la red de investigación y desarrollo para vehículos autonómos de Changan, que integrará los recursos globales de la automotriz en este campo.
Está, por ejemplo, su centro de Investigación y Desarrollo de Tecnología de Vehículos Autónomos con sede en China, y un departamento similar en el Centro de Investigación y Desarrollo de Changan en los Estados Unidos. La firma proyecta crear una oficina en Silicon Valley, California, y un centro de desarrollo de software en la India. Cada uno de ellos se enfocará en crear tecnologías de hardware y software que serán claves en la preparación de los vehículos del futuro.
Para el año 2020, Changan habrá invertido un acumulado de US$760 millones de dólares en todos estos aspectos del programa de vehículos autónomos. Esto demuestra la fortaleza y liderazgo de la marca en la gran industria china de vehículos, liderazgo que la llevará a dar el gran salto del automóvil tradicional al “smart automobile”.