El uso más frecuente que los afiliados al sistema financiero hacen de las transferencias interbancarias (TIN) es el del depósito a terceros y el menos utilizado es el del pago de tarjetas de crédito, según lo demuestra un estudio realizado por la consultora Arellano Marketing para la Cámara de Compensación Electrónica (CCE), entidad encargada de facilitar dichas transferencias.
El análisis efectuado sobre la base de 360 personas entre 25 y 55 años de los niveles socioeconómicos A, B y C refleja también que los dos factores que favorecen el uso de las TIN -según la percepción del público objetivo- son la seguridad y el ahorro de tiempo. El primer factor alude a la posibilidad de evitar robos o seguimientos; y el segundo, se refiere a la oportunidad de evitar colas y traslados de dinero entre oficinas bancarias.
Del total de encuestados que señalaron hacer uso de las TIN, un 35% manifestó que el depósito a terceros es el trámite más frecuente por el cual recurren a esta modalidad. El segundo uso es el de retiro y depósitos entre cuentas propias (28%), seguido del cobro de haberes y/o CTS (20%), y el pago de tarjetas de crédito (13%), este último efectuado todavía en un alto porcentaje a través del canal tradicional, es decir, las agencias bancarias.
En el caso del pago de tarjetas de crédito, el bajo índice del uso de las TIN se debe -según las conclusiones del estudio- a que existe el temor de que se podría perder el dinero en caso exista alguna dificultad en la transferencia, o que los trámites para subsanar alguna falla podrían resultar muy engorrosos. Al respecto, Jorge Martínez (Gerente General de la CCE) refirió que el usuario debe tener la seguridad de que su dinero no corre peligro. “El proceso de las TIN es totalmente seguro, pues en ningún momento el usuario digita la clave de su tarjeta, y la fecha de origen de la transferencia es la que se usa para el pago en el caso de que éste se haga en el último día. Además, la CCE usa los procesos más seguros para realizar la compensación electrónica, pues cumple con estándares internacionales y con las normas del Banco Central de Reserva del Perú”, explicó.
La Cámara de Compensación Electrónica encargó este estudio con el objetivo de conocer cuál es el nivel de conocimiento acerca de los beneficios de las TIN que tiene su público objetivo.