Enterese.net.- La pandemia y la cuarentena han causado mucho estrés y agotamiento. Esto es especialmente cierto para los docentes, que han tenido la necesidad de adaptar rápidamente sus clases y métodos de enseñanza al entorno virtual.
Los problemas que se presentan en clases a distancia y la presión adicional que puede provenir de los alumnos, padres de familia o instituciones educativas afectan notoriamente su salud mental, lo que incluso repercute al momento de dictar una clase.
“El que un maestro tenga la mente sana y el cuerpo sano va a contagiar a los suyos y sus alumnos también lo notarán. Si el maestro no disfruta de buena salud mental que incluye el bienestar psicológico, físico y emocional lo transmitirá claramente. Será notorio incluso en el teletrabajo con la mirada, el tono de voz, la postura de sus brazos y su comportamiento”, advierte Carol Leyla, psicóloga de Ediciones #COREFO.
Para prevenirlo, la especialista da estos consejos:
- Sé flexible. Estamos en un contexto de incertidumbre. Los procesos de avance y aprendizaje de niños y niñas están cambiando y pueden surgir problemas. Lo importante es evitar que la frustración y los sentimientos de inseguridad nos abrumen. Para esto, es recomendable ser flexible en la manera de enseñar e intentar diferentes maneras para alcanzar las metas de la clase.
- Cuida tu salud física. Sentirte bien físicamente también repercute en tus emociones. Cada día, tómate el tiempo de asearte y arreglarte; duerme las horas necesarias y haz ejercicio al menos 30 minutos. Puedes lograrlo sin salir de casa: baila, sube y baja escaleras, camina o consigue una bicicleta estacionaria. También podrías empezar practicar yoga.
- Desconéctate. Es importante preparar tus clases y responder las dudas que tus alumnos envíen por e-mail o Whatsapp. Sin embargo, también es necesario un tiempo de relajación dedicado a tus hobbies o actividades de ocio. Todos tenemos un horario de trabajo que debe ser respetado incluso en el home office.
- Busca ayuda. Ningún profesor puede solucionar todo por lo que están pasando sus estudiantes. La pandemia ha afectado por igual a niños y adultos. Ante una dificultad con un estudiante, acércate a los padres de familia y trabajen de la mano en resolverla.
- Escucha a tus estudiantes. La educación a distancia es un reto y puede repercutir en las calificaciones de los alumnos. Este descenso en el rendimiento puede causar preocupación en un docente. Por esto, es importante que haya una comunicación clara entre alumnos y profesores, para solucionar juntos los problemas que surjan en las aulas virtuales.