Por Fernando Grados
Analista Senior TI
fgrados@dominio-consultores.com
Las últimas semanas hemos tenido en la industria de cómputo noticias nada buenas. En el primer trimestre del 2013, según Gartner, hubo un decrecimiento en los embarques mundiales de computadoras de 11.2%, con respecto al mismo período del año pasado. Los servidores han tenido una tendencia de menor deterioro -0.7% en unidades y de un -5% en ingresos en dólares para los fabricantes; donde la peor caída la han tenido los servidores RISC/Itanium.
La pregunta es ¿Que está pasando?, ¿Las computadoras ya no son interesantes o importantes para la humanidad?. Creemos que la respuesta está en los efectos de dos importantes tendencias que nacieron en la industria, pero que ésta no ha sido capaz de asimilar a la velocidad necesaria para cambiar su estrategia de negocio y hoy esta incapacidad le está pasando la factura.
La movilidad tiene hoy como sus principales actores a los smartphones y a las tablets. Ambas al igual que una notebook o desktop, son computadoras, pero tienen una característica en su naturaleza diferente, mientras que las últimas tienen aplicaciones y usos vinculados a la producción de información, los smartphones sirven para comunicaciones y las tablets han sido diseñadas para consumir información.
Hasta hace unos de años si una persona necesitaba un computador, obligada tenía que optar por una desktop o una notebook, ya sea que la utilizara para hablar por Skype, jugar, crear documentos, manejar grandes bases de datos o diseñar un gráfico. Ha pasado que innovadores de la industria han creando equipos que tienen por sus características más versatilidad para la naturaleza del uso que el consumidor le dé y como consecuencia nse han creado nuevos nichos de mercado.
Justamente, esto es lo que la industria tradicional (Wintel) aún no digiere y comienza a causar una confusión en sus organizaciones, impidiéndoles establecer estrategias adecuadas, así como aplicar tácticas inadecuadas. Por ejemplo, ¿Si mi necesidad como consumidor es leer correos, revisar redes sociales, enterarme de las noticias, apreciar mis fotos o escuchar música ¿Por qué me compraría una notebook de S/.3,000, si con una buena tablet de S/. 900 puedo satisfacer mi necesidad?.
Hasta hace poco tiempo en términos de computación personal sólo existían las PC de la llamada plataforma Wintel, llamada así por la alianza Windows/Intel, pero que en realidad era algo más amplia porque habían otras marcas de procesadores como los AMD y otros sistemas operativos como el Linux, con todas sus variantes que corrían sobre esta misma plataforma.
Con el advenimiento de las PDA (Personal Digital Assistant), que luego fueron transformados en los ya conocidos Smartphone, aparecieron nuevos procesadores como ARM y sistemas operativos que terminaron quedándose como nuevas plataformas (Android y IOS móvil). Finalmente por iniciativa e innovación de Apple, seguidos de Samsung, fueron puestas en el mercado las tablets, equipos que han causado una disrupción en el mercado.
Los fabricantes tradicionales han intentado apagar fuego con gasolina. Han querido combatir la nueva ola de productos móviles con ultrabooks o híbridas que no terminan convenciendo a la gran masa de consumidores. Mientras tanto más empresas chinas hacen su agosto tratando de ganar del río revuelto, vendiendo equipos de muy baja calidad y sin las prestaciones que las líderes de mercado como Apple y Samsung tienen. La falta de sensores de ubicación, dirección, sonido, luz y otros son el denominador común de estas falsas tabletas.
Y como los fabricantes no entienden los conceptos de los productos, siguen abriéndose una brecha cuyas cifras ya están mostrando una fuerte caída en las ventas de computadoras. En nuestro país las ventas de computadoras ensambladas, que son casi el 70% del mercado de desktop han mostrado ya una caída desde el año pasado del 10%, y en el primer trimestre de este año hemos apreciado una disminución del crecimiento de notebooks, mientras que podemos observar un fuerte crecimiento de Smartphones y Tablets. (Ver siguiente cuadro del mercado peruano)
La pregunta que viene es la siguiente, ¿Si las marcas aún no están preparadas para el cambio, lo están los mayoristas y minoristas de la industria?
Por otro lado los servicios de Cloud Computing han empezado a adquirir más adeptos, a pesar de la desconfianza en temas de seguridad. Esto provocado por el importante ahorro que se puede lograr con el uso de estos. Y no sólo hay ahorro para los usuarios.
Un informe del Lawrence Berkeley Lab (http://www.lbl.gov/) examina de qué pasaría si las empresas de todo el país pasaran de ser dueño de sus propios centros de datos y servidores para repartir la responsabilidad de correo electrónico y aplicaciones de productividad a los proveedores de la nube. El ahorro de energía sería tremendo. La energía necesaria para la gestión de centros de datos (y producir el material utilizado en el interior de los mismos) se reduciría en un 87%, pasando de 373 petajoules un año a 47 petajoules, un año. El ahorro de energía sería suficiente para abastecer a Los Angeles durante un año. Pero quizás lo más alucinante es la reducción en la cantidad de hardware que se requiere para ejecutar la infraestructura de TI del país (USA). El número de servidores de correo electrónico, que proporcionan conectividad de correo electrónico a 87 millones de usuarios, se podría reducir de 3,5 millones a 47.700 servidores, una reducción del 98,6 por ciento. La diferencia es tan grande, porque la mayoría de estas cajas están subutilizadas: en lugar de manejar 2.000 o menos individuos, algunos servidores de correo electrónico sólo admiten ocho usuarios. Dicho de otra manera, podría entrar en una sala de servidores de hoy y tirar 99 por ciento de las casillas en el fregadero sin que nadie lo note. El número de servidores de aplicaciones de productividad podría caer de 1.237.000 a 32.400, una reducción del 97 por ciento[1].
Nosotros estamos seguros que desktops, notebooks, smartphones y tablets coexistirán, aunque las dos primeras categorías tendrán una importante disminución de las unidades vendidas, dando el paso a la venta de más productos móviles. También sabemos que los servicios en la nube marcarán los negocios para los mercados empresariales y de consumo en los próximos años. Entonces debemos de despercudirnos de la tradicional plataforma y de la manera como se ha venido gestionando la infraestructura informática porque ha llegado el momento para cambiar decididamente a mejores estrategias y enfrentarnos con inteligencia y eficacia a estos nuevos retos.
[1] Tomado y editado de la nota de prensa de Forbes “Will Cloud Computing Kill The Server Market?”, desarrollada por Michael Kanellos