- Con 454 millones de espectadores en todo el mundo y más de mil millones de dólares en ingresos, el videojuego competitivo se posiciona como uno de los sectores estratégicos del ocio digital.
Enterese.net.- La Asociación Peruana de Deportes Electrónicos y Videojuegos, es una prueba de la fuerza que ha alcanzado esta actividad en el país. Es tal la penetración que ha logrado, que esta agremiación ofrece distintos servicios de consultoría para empresas o para ‘jugadores profesionales’, que llegan al nivel sicológico.
Al respecto, el Doctor Marcos Antón, director del Máster en Gestión de esports de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), destacó: “se han convertido en un auténtico fenómeno de masas, capaz de reinterpretar nuestra manera de entender la competición, el espectáculo y el deporte. Lo que comenzó como una reunión de científicos en 1972 para jugar Spacewar, se ha convertido en una industria millonaria, muy similar a las grandes competiciones deportivas”.
Con 454 millones de espectadores en todo el mundo y más de mil millones de dólares en ingresos, este fenómeno se posiciona como uno de los sectores estratégicos del ocio digital. Un sector globalizado que salta de internet a todos los puntos de la geografía mundial a través de numerosos eventos presenciales cada vez más multitudinarios, lo convierte en una oportunidad para el desarrollo de negocios en múltiples sectores, como el tecnológico, la publicidad o hasta el turismo.
Los esports son la profesionalización de las competiciones de videojuegos y nacen como un fenómeno paralelo al consumo tradicional del videojuego, allí se debe aclarar que no es lo mismo un gamer (como se puede denominar a cualquier jugador de videojuegos) que, a un progamer, es decir, el de nivel profesional, quien participa en torneos y competiciones, generalmente, dentro de un equipo o club.
De allí se despende algo interesante y es que nace un nuevo perfil; el espectador, que no necesariamente tiene que ser competidor, sino que disfruta viendo esta actividad como espectáculo, de la misma forma que cualquier fan a un deporte tradicional.
Marcas como aliadas
Gran parte de la escena está aún por desarrollar debido a la falta de inversión, allí hay un espacio para seguir potencializando el sector y eso se puede lograr con la entrada de las marcas; por un lado, para el sector, le permite el desarrollo económico del mismo y para las organizaciones, que pueden sacarle frutos a una industria pionera con un perfil de consumidor bastante definido. Cada vez más, los esports están encontrando mayor espacio en la cultura popular y en entretenimiento mainstream; si siguen por ese camino, solo se puede vaticinar un crecimiento constante de la industria asociada a ellos.
Ha sido tal la acogida, que incluso importantes franquicias deportivas han entrado a los esports, como ha sido el caso del Santos Fc de Brasil, Valencia CF (España), Manchester City o el Besiktas, entre otros. En conclusión, la puerta es gigante y los países, inversionistas y marcas, tienen un abanico de posibilidad para aprovechar la industria para hacerla crecer.