- En segundo lugar se encuentra el pago del crédito vehicular, seguido por el pago de préstamos personales y, en último lugar, está el pago de la tarjeta de crédito.
- La generación baby boomer le da más prioridad al pago del crédito hipotecario que las generaciones millenial y X.
Enterese.net.- Los consumidores peruanos priorizan el pago de los créditos hipotecarios desde el 2016, por encima de otros tipos de deuda, según un reciente estudio de Equifax, dueña de la central de riesgos Infocorp, que revela cuáles son las prioridades de pago de los deudores peruanos en situaciones en que sus deudas superan su capacidad de pago y se ven forzados a elegir qué pagar primero.
El informe se elabora gracias a los datos obtenidos a través de su plataforma #Ignite, donde aprovechan el Big Data para brindar soluciones analíticas que dan vida y sentido a sus datos. Además permite mejorar los perfiles crediticios de personas, según su riesgo, estilo de vida y región en la que viven. Esta información y análisis de #Equifax ayudará a las empresas a ofrecer mejores productos, tomando en cuenta las decisiones de pago de los peruanos.
“Existe un cambio de las prioridades de pago desde el periodo 2016 a 2017, esto puede deberse al Fenómeno del Niño. El crédito hipotecario está volviendo a tomar relevancia y el crédito vehicular se mantiene ahora en segundo lugar”, dijo Vanessa Tarazona, directora de Data & Analytics para Perú y Ecuador.
Según la data analizada por Equifax, donde se utilizó del índice suma cero usando el ratio de malos pagadores (con 60 días de atraso) en una ventana de 12 meses, los consumidores tienden a pagar primero el crédito hipotecario, con un total de 251,144 créditos, y el cual tiene un monto promedio de deuda de S/.104,499.
En segundo lugar se encuentra el pago del crédito vehicular, con 120,567 créditos, y un monto promedio de deuda de S/. 20,639 según el análisis realizado por #Equifax. El pago de préstamos personales, con un total de 3.2 millones entregados, se encuentra en tercer lugar con un monto promedio de S/.3,749. En último lugar de la lista de priorización de pagos está el pago a la tarjeta de crédito, en el Perú existen 2.9 millones de tarjetahabientes con un monto de deuda promedio de S/.1,979.
Pago por generaciones
Cada generación se caracteriza por tener un estilo de vida distinto y esto no cambia cuando se trata de cumplir con las obligaciones.
Según el análisis de priorización de pagos por generaciones, elaborado por Equifax, la generación silenciosa le da más prioridad al pago crédito hipotecario que el resto de generaciones. Mientras que los baby boomers se encuentran en segundo lugar y su deuda promedio es de S/. 81,625. Los milenials y la generación X, son menos proclives a pagar sus créditos hipotecarios, y tienen deudas promedio de S/. 121,547 y S/. 106,457 respectivamente.
Al momento de pagar un crédito vehicular, los milenials y la generación X lideran el ranking de pagos, con una deuda promedio de S/. 18,869 y S/. 23,196 respectivamente. Mientras que los baby boomers se ubican en tercer lugar con una deuda de S/. 22,019 y, finalmente, la generación silenciosa. Además esta última es la única que le da prioridad dos al préstamo personal en vez del vehicular.
En todas las generaciones el pago a la tarjeta de crédito no representa una prioridad, afirmó Tarazona.
Riesgo de crédito
Las personas con riesgo de crédito entre alto y bajo tienen diferentes formas de priorizar sus pagos. Usando el score de riesgo de mercado de Equifax, se tiene una preferencia de pago del crédito vehicular desde el 2016.
Para todos los niveles de riesgo, el crédito vehicular pasó a ser la prioridad de pago número uno durante el período abril del 2016 a marzo del 2017. Esto se relaciona con el impacto del Fenómeno del Niño en el Perú que llegó a poner en riesgo diversos bienes materiales.
Todos los niveles de riesgo priorizan el pago del crédito hipotecario a excepción del nivel alto medio que prioriza el crédito vehicular.
Las tarjetas de crédito son la última prioridad de pago en todos los niveles de riesgo, teniendo una amplia caída para el nivel de riesgo más bajo en comparación con las preferencias de pago del 2015.