Una alimentación balanceada, rica en DHA, es una de las mejores maneras para mantener nuestro cerebro saludable
Lima, 27 de mayo de 2015.- El cerebro, como órgano fundamental de nuestro organismo, necesita de diversos cuidados para mantenerse saludable y activo con el paso del tiempo. Para ello, es necesario el desarrollo de hábitos saludables que lo ayuden a fortalecer y asegurar su buen funcionamiento.
Comer saludable
Mantener una alimentación equilibrada es la base principal para tener un cerebro sano. Una dieta rica en nutrientes esenciales como el DHA contribuye en la salud neurológica, ya que se considera un factor protector al formar parte de las membranas de las células del cerebro.
Al tratarse del órgano más complejo y activo del cuerpo, el cerebro precisa de nutrientes para funcionar de una manera eficaz, ya que consume hasta un 20% de la energía que utilizamos para vivir. Es así como la inclusión de Omega-3 DHA en la ingesta diaria puede contribuir para mejorar la capacidad del cerebro y el almacén de memoria.
Se ha demostrado que nutrientes como el omega 3, son buenos para el cerebro y útiles para disminuir el riesgo de la aparición de problemas cognitivos. Estudios de observación indican que una ingesta alta de pescado, una buena fuente de DHA, se puede asociar con la disminución del riesgo de desarrollar demencia tipo Alzheimer y una desaceleración en el deterioro cognitivo normal, relacionado con la edad.
El DHA se encuentra de manera natural en los pescados grasos de agua fría como el atún, caballa y salmón; y además en alimentos fortificados, como fórmula para bebés, leches, jugos, aceites y otros; y en suplementos dietarios. Su consumo frecuente puede disminuir el riesgo de la aparición de problemas cognitivos, al tener un rol importante en la retención de la función cognitiva en etapas posteriores de la vida.
Ejercita mente y cuerpo
Realizar actividades físicas permite liberar tensiones y reducir el estrés, no solo del cuerpo sino también de la mente. Al igual que se ejercitan los músculos, también se ejercita el cerebro mediante actividades deportivas que ayuden a motivar el cuerpo y también la memoria.
El cerebro no sólo permite el correcto funcionamiento de todos los sistemas, sino que además es el almacenador de todos los recuerdos que habitan en nuestra memoria. Por ello, la práctica deportiva puede ayudar a mejorar el razonamiento y la atención.
Ser sociable
Los expertos coinciden en que mantenerse activo y socializar ayuda a tener una mente sana, capaz de retener más información. Es así como la mente tiende a activarse notablemente cuando entra en contacto con otras personas mediante el desarrollo de una conversación fluida y amena.
Conocer el funcionamiento del cerebro y cómo mantenerlo sano, es el puntapié inicial para forjar un futuro saludable. Esta información nos permite actuar en consecuencia y volvernos más conscientes de la importancia de modificar ciertos hábitos, para poder preservar nuestra salud y disminuir el riesgo de contraer enfermedades neurodegenerativas más adelante.