El Eco-Panel alcanza los 16 metros de altura, está hecho con botellas de plástico recicladas y genera luz a base de energía solar.
San Luis, es una marca peruana con 61 años de trayectoria en el país, comprometida con el cuidado y conservación del planeta, a través de mensajes y propuestas innovadoras que promueven actitudes positivas a favor de la protección del medio ambiente.
Es así, que como parte de su compromiso de sostenibilidad, desarrolló junto a un equipo técnico y creativo el primer Eco-Panel con botellas de PET recicladas, que se ilumina con energía solar.
Para la construcción del Eco-Panel San Luis, que mide 16 metros de altura, se han utilizado 10 mil botellas de plástico recicladas; equivalente a la cantidad de plástico que se arroja en una sola playa durante el verano. Además, cuenta con 10 paneles solares que atrapan la luz del día para transformarla en luz de noche. De esta forma, el panel se verá iluminado sin generar mayores emisiones de CO2 por el uso de energía eléctrica. Podemos ver el eco-panel en el km. 44 de la carretera Panamericana Sur, camino a las playas.
Esta acción, será acompañada de activaciones en peajes y playas para motivar a los visitantes a cuidar el planeta con una acción simple como “reciclar”. Ello, teniendo en cuenta que; según data reciente de algunas comunas como Punta Negra, Punta Hermosa y Santa María del Mar los miles de veraneantes que llegan cada fin de semana dejan entre 7 y 25 toneladas de basura en las playas.
En ese sentido, el Eco-Panel San Luis, se crea con el objetivo de generar una participación más activa y, sobre todo, permanente de los ciudadanos en el reciclaje.
Hoy el mundo está tomando cada vez más conciencia ambiental. Sin embargo, en el Perú aún nos encontramos con cifras desalentadoras. Según el último informe de la ONG Vida, las botellas de PET constituyen el 13% de la basura que se arroja en mares, lagos y ríos; y el plástico demora entre 100 a 150 años en bio-degradarse.
“En San Luis, apuntamos hacia un nuevo enfoque de consumidor: El Vitalista; un consumidor más activo, motivado y con necesidad de hacer cambios positivos. Es por ello que esta iniciativa, más allá de tener un fin publicitario, busca llamar la atención de una forma muy visual y directa hacia una cultura de reciclaje. Más aún, cuando tenemos un verano a puertas, que es el momento en que se registran los más altos índices de contaminantes y desechos en nuestras playas. Todos podemos contribuir con el cuidado de nuestro planeta, reciclar, es un buen comienzo” señala, Julia Sobrevilla, gerente de Asuntos Públicos y Comunicación Corporativa de Coca-Cola Trasandina en el Perú.