En la ceremonia se reconoció a los ganadores quienes recibieron estímulos por un total de S/. 60,000 soles, distribuidos en S/30,000 para el primer lugar, S/.20, 000 para el segundo lugar y S/. 10,000 para el tercero, destinados a potenciar los proyectos ganadores en la categoría Gran Premio. También se entregarán computadoras portátiles de última generación para los ganadores de la categoría Testimonio de Vida.
El primer lugar del Gran Premio lo obtuvo William Pablo Soria Ruiz, de la localidad de San Antonio del Estrecho, provincia de Maynas en la región Loreto con el proyecto “Atención Integral de Enfermedades”. Se trata de una iniciativa impulsada por la Pontificia Universidad Católica del Perú que fomenta la conectividad en beneficio de la salud de los pobladores. En esta localidad, se instaló una red de comunicación en 7 establecimientos de salud en el Perú y 5 en Colombia, ubicados en la cuenca del Río Putumayo con capacidad para soportar la transmisión de información e imágenes médicas.
“Este proyecto busca fortalecer la capacitación del personal de salud en el uso de las TIC para mejorar las estrategias de Atención Integral de Enfermedades Prevalentes de la Infancia (AIEPI), salud materna, vigilancia nutricional y epidemiológica.” señala, William Pablo Soria, ganador del primer lugar.
El segundo lugar fue para Jaime Antonio Torbisco Martínez, con el proyecto Chalhuanca Digital. El proyecto busca contribuir a la mejora de la calidad de vida de la población de Chalhuanca a través de la provisión de herramientas y servicios basados en las TIC. El proyecto brinda el servicio de internet en la ciudad y de este modo facilita todas las herramientas y oportunidades que la conectividad genera en múltiples aspectos: educación, producción y gobierno.
Finalmente, Dionisia Aereopajita Loayza Angulo recibió el premio al tercer lugar con el proyecto uso de Internet para la mejora en la comercialización de aguaymanto. Gracias al uso de las líneas celulares, RPM e internet, los productores miembros de la asociación de productores «Apu Anta Rumi» han logrado incrementar su nivel de ventas, mejorar sus procesos de producción y generar alianzas con otras instituciones locales, regionales y nacionales.
Durante la presencia de Sendero Luminoso en la zona de Ayacucho, muchas familias emigraron a otras ciudades para huir de la violencia, dejando en abandono sus tierras que fueron tomadas por el aguaymanto que crecía de manera silvestre. “Aprovechando la situación, 30 familias nos congregamos y tomamos la iniciativa de empezar a cultivar este fruto y a difundir sus propiedades y beneficios a través de la exposición en ferias, eventos regionales y nacionales”, destaca Dionisia.
Asimismo, se otorgó el “Premio Especial al Testimonio de Vida” a las cinco mejores historias de vida de personas que destacaron entre los diez finalistas de esta categoría.
- Dayce Amanca, Yauricocha (Huancavelica).- A partir de una experiencia con una de sus clientas, decide formar la Asociación de Tejedoras, y de manera organizada desarrollar sus productos y comercializarlos. Utiliza las líneas celulares para incrementar sus ventas y mejorar su relacionamiento con otras entidades potenciales aliadas. “Mi objetivo era brindarle, a más mujeres como yo, la posibilidad de contar con un ingreso económico propio para el bien de sus familias y ellas mismas. Siempre pensé que si iba a liderar algo sería de manera transparente y para beneficio de todos.” Indico Amanca.
- Alipio Huata, Huallano (Puno).- Gracias a las telecomunicaciones ha logrado mejorar la calidad del servicio que ofrece a sus comensales en su restaurante ubicado en la isla de Amantani. Ahora mantiene un mejor contacto con los operadores turísticos en Lima, Cusco y Arequipa, se comunica mejor con sus proveedores y recibe más visitantes, lo que ha mejorado sus ingresos y los de su comunidad.
- Benjamín Arando, Acomayo (Cusco).- A través del uso de Internet ha logrado acceder a capacitaciones que le han permitido mejorar su desempeño como docente y el de sus colegas.
- Anthony Casimiro y Ghandy Reyes, Pariacoto (Áncash).– Gracias a su emprendimiento generaron una cabina de Internet como un negocio local en su comunidad, la misma que el día de hoy ha crecido y mejorado muchísimo, facilitando muchas operaciones a los pobladores y permitiéndoles el acceso a múltiples herramientas y beneficios.
- Jhon McCarthy (Santa Clotilde Loreto).- Mediante las TIC ha logrado contribuir al uso de la telemedicina en su localidad.
Los trabajos finalistas fueron evaluados por un jurado calificador de reconocida trayectoria, compuesto por Augusto Álvarez Rodrich, Fabiola León Velarde, Luis Alberto Bonifaz, Pepi Patrón, Luis Bustamante Belaunde, José Távara y Fernando Villarán.